Amanecer Parte 2

La nueva Bella

Mi corazón tartamudeó un par de veces y 
después latió sordamente una vez mas.
No hubo sonido alguno.
Ni una respiración, ni siquiera la mía.
Durante un momento lo único que puede
comprender fue la ausencia del dolor.
Y entonces abrí los ojos y miré
maravillada hacia arriba.

Bella Cullen



Podía oír todo con una inusitada claridad.
Mi visión periférica podía registrarlo todo
hasta los hilos incandescentes de los filamentos
en la bombilla que estaba encima de mi
cabeza, podía ver las motas de polvo flotar en 
el aire, era tan hermoso que inhale sorprendida.

En ese momento me di cuenta de que 
el aire ya no me hacia sentir ningún alivio,
mis pulmones no me lo pedían y 
yo no lo necesitaba.

Neófita
 

Mi familia de vampiros estaba cautelosa
contra la pared mas lejana de la 
habitación, Jasper y Emmett estaban delante de todos como si hubiera algún peligro,
instintivamente
las aletas de mi nariz se agitaron, 
buscando la amenaza, Pero como acababa de comprender, lo que no
había entendido, era que el peligro era yo.

Mi nueva piel

Edward alzo una mano con vacilación y
 me acarició la mejilla.
Era suave como el satén, suave como una pluma
y ahora se ajustaba exactamente a la
temperatura de mi piel

Edward

Nunca lo había visto de ese modo. 
Era como si antes hubiera estado ciega. 
Por primera vez, mis ojos ya sin sombras borrosas 
y las  debilidades de mi humanidad, vi su rostro. 
Era aun mas hermoso, Jadee y me fue difícil expresarme.
-Bella, mi amor? lo siento, se que uno se siente 
desorientado al principio, pero todo esta bien-
No puede contestar inmediatamente, su voz era la
sinfonía mas perfecta creada jamas por
el hombre.







                                           Mi reflejo 

En ese momento, Alice entro a la habitación
 acarreando un enorme espejo hacia mí
-Esto es más por tu propia satisfacción-

Aquella criatura extraña que había en el cristal,
 era indescriptiblemente hermosa. 
Su contorno era fluido, incluso en reposo, 
su rostro impecable, pálida como la luna, 
tenía las extremidades esbeltas y fuertes, 
su piel relucía sutilmente luminosa como una perla y ¡sus ojos! aunque debía esperarlo, centellaban 
como despiadadas llamas rojas.
¿Quién era ella? 
A primera vista no pude encontrar mi propio rostro en sus suaves y perfectos rasgos.








Hora de Cazar


Alice debió haberse aprovechado de que la quemazón me había 
dejado grogui y no podía darme cuenta de que me ponía aquel vestido 
¿Como podría cazar con un traje como este? 
¿un vestido ajustado de seda azul con tacones de aguja?
 Esta mujer se había vuelto loca.

Velocidad

-Sígueme...Si puedes-.
 Sonrió con verdaderas ganas y echo a correr. 
 No podía imaginarme como Edward movía las 
piernas con tanta velocidad. 
Sin embargo yo era mas fuerte y 
cada una de mis zancadas equivalía a tres de las suyas.

Mientras corría no pude evitar reír de la emoción, pero las carcajadas
no mi hicieron perder velocidad ni perder el rumbo.
mis pies descalzos tocaban el suelo en tan pocas ocasiones que 
sentía que estaba volando y no corriendo.